Por María Celsa Rodríguez
Yo apoyé la propuesta de gobierno del Presidente Macri. Si bien algunas cosas hizo bien, otras como el gasto público, aún es una materia pendiente.
Tocar a los jubilados no fue buena idea, pero ya sabemos que la reforma es necesaria. Igual los gastos del día viernes y del lunes en seguridad y la reparación de los daños materiales que ocasionaron a la ciudad y a particulares a través de las indemnizaciones, deberá responder el Estado teniendo sus resultados en las cuentas fiscales. Pero también en las inversiones que se abortaran después de esto.
El kirchnerismo movió a sus revoltosos de tal manera que los efectos exteriores lograron conseguir el efecto dentro del Congreso y así no alcanzaron el quórum para sancionar la ley.
El espectáculo fue patético, mientras el mundo miraba a los primitivos argentinos destruyendo la ciudad, más allá de la crítica desubicada de la diputada Carrió a la Ministra de Seguridad que dijo que «No se necesitan tantos gendarmes», pero si no fuera por los gendarmes que cubrían los alrededores del Congreso hoy seguramente tendríamos que lamentar el incendio y destrucción del Palacio Legislativo.
El desvaciamiento del Anses se debe a que fue la alcancía del kirchnerismo. Los mismos que movieron la gente a que tomen las calles.
Desde las redes sociales se invitaban a los militantes por 500 pesos, traslado, desayuno y almuerzo. Este mismo gremio que también apoya a los Mapuches violentos. Sin embargo una fuente me dijo que se pagó hasta 4,500 pesos.
Era muy claro, querían atentar contra la democracia, querían incendiar una institución de la República. El Congreso era el blanco, y eso era evidente por la cantidad de bombas molotov incautadas. Muchos legisladores en su inocencia o en su ignorancia le hicieron el juego.
El kirchnerismo preparó la escena, están acorralados judicialmente, y solo los fueros parlamentarios protegen a la corrupta Cristina Kirchner.
La oposición lo tiene atragantado al Presidente Macri, no lo digieren como mandatario. El oficialismo confió en que tenían el quórum y no era así. Confiaron en los gobernadores peronistas, y estos solo juegan para sí mismos. Ellos firman pactos que no cumplen y acuerdan cosas que se olvidan. El intendente kirchnerista de Resistencia, el procesado -por corrupción- Jorge Capitanich, en oposición con el Gobernador Peppo, llamó a los diputados del Frente Chaco Merece Más, a no dar quórum y rechazar la Reforma Previsional.
El gobierno no supo comunicar bien de porque era necesaria la reforma. La presión de Macri, de sacar por Decreto de Necesidad y Urgencia, fue poner sal sobre una herida. Sonaron fuerte las consecuencias: «¡¡Eso es inconstitucional!!»: gritaron las voces en contra. Desde el peronismo el fracaso de la sanción de la reforma previsional lo festejaron fumándose un abano de felicidad, mientras los muy trasnochados lamentaban no conseguir el golpismo que diseñaron.
Macri convive con una mafia política que lo quiere sacar del medio y sueñan con ese helicóptero partiendo de la Rosada.
Los gritos, las peleas, los empujones dentro del recinto se hacían intensos, mientras afuera del Congreso era un batalla campal. Vimos a diputados K enfrentar a Gendarmería. Pero todos se preguntaban ¿quien financia a los movimientos piqueteros? Un poco lo financia el Estado a través del sistema de tercerización de la política social de las organizaciones sociales dándole el manejo de los fondos. Otros movimientos como Quebracho, se dice que lo hacen por medio de las organizaciones iraníes, algo que alguna vez lo ratifico el detenido Luis D’Elía, que afirmó que con los piqueteros «hay financiamiento internacional de todos los colores», y que alguna vez lo financió el chavismo. Sin embargo se habla de «otros» fondos.
Lo cierto es que entre los detenidos habían mas extranjeros que nacionales. Los punteros políticos eligieron mano de obra extranjera para generar los atropellos violentos en las calles. De acuerdo a la lista que me pasó una fuente, los heridos con balas de goma eran de Bolivia, Paraguay y Perú, y sus edades oscilaban entre los 18 a los 59 años. Todos reciben asignación universal por hijo, pensión sin aportes y beneficios de garrafas.
El próposito era desestabilizar al gobierno. Uno portando la remera de la Campora dijo «venimos a echar a Macri»… «Fuera Macri», gritó.
Dentro del Congreso se tejió la trampa de atentar contra el sistema, quebrando el normal funcionamiento del parlamento, la falta de respeto y autoridad hacia el Presidente de la Cámara Baja, demostró que la cordura había perdido la compostura. Con apretadas y amenazas, típica actitud de mafiosos la oposición logró que se levantara la sesión. Todo se orquestó de tal manera que la patota que estaba afuera tenía sus líderes adentro del Congreso: Máximo Kirchner, el Cuervo Larroque, Axel Kicillof, Juan Cabandié, Agustín Rossi, Leopoldo Moreau, Horacio Pietragalla, Mayra Mendoza y el masismo con Donda a la cabeza.
En las calles se incendiaban autos y contenedores. Los saqueos a los comercios, lanzar piedras con gomeras, era la escena que convirtió la tarde de Buenos Aires, en una locura.
Estaba planeado el golpe institucional tanto en la Legislatura nacional como en la bonaerense. Y detrás de todo esto está la mano de la corrupta Cristina Kirchner, donde los K y el peronismo residual dirigieron a la manada. Ese abrazo de José Ignacio de Mendiguren con Agustín Rossi, – que cubrió las pantallas-, es una clara muestra que los K y el Frente Renovador marchan juntos.
Los gobernadores peronistas quieren debilitar a Macri, no cumplen lo que pactan, dándole una estocada a traición.
El kirchnerismo usó la mano de obra que siempre supo usar para hacer desmanes: los piqueteros, la izquierda marxista-trotskista y la Cámpora. Así vendían al mundo la imagen de un Presidente débil, de un gobierno frágil.
Los empresarios han demostrado su descontento y preocupación que afecta a la hora de tomar decisiones en materia de inversiones y generación de empleo para el 2018. El bono que compensa a los jubilados será un costo de 4,200 millones, mientras que con la reforma piensan ahorrar 50,000 millones para el 2018, con una expectativa del 3,2% del déficit fiscal.
La reforma tributaria y previsional son factores indispensable que despierta una luz de incentivos para los números oficiales, sin embargo el achicamiento del Estado y el manejo de las cuentas en las funcionalidad estatal aún no ha ajustado sus recursos contables. Estamos en el Titánic y los ignorantes argentinos parecen no darse cuenta que el iceberg está en nuestro camino. Es hora de dejar de ser adolescentes y empezar actuar con madurez y sensatez.
El gobierno no encuentra el eje de equilibrio en los lineamientos democráticos entre el desconcierto de lo que se viene y el caos de lo que pasó, por estar rodeado de una oposición con mecanismos infantiles que nos trasladó en un instante a un pasado que no queremos.
Es momento que Macri se dé cuenta quienes son sus aliados y quienes son sus enemigos.
La autora es: Directora de ChacoRealidades; www.chacorealidades.blogspot.com.ar; Analista del Circulo Acton Chile @CirculoActonChile